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VIBRANDO

 




VIBRANDO


Quisiera ser tu serenata 

tu canción de amor

tu arroyo de agua clara

el que me refresca por la noche

y me sacia por la mañana


Quisiera ser tu mantilla 

protegerte de la escarcha

sobre tu pelo un sombrero

de violetas pardas.


Un ávaro sediento 

de tus caricias

un alma necesitada 

de tu perfume

de rosas y lirios.


Un pez nadando 

sobre tu cuerpo de ola

una mirada 

con la espuma del alma.


Un lobo vagando 

en un bosque desierto

buscando tu quejidos

tus lamentos de porcelana


Una canción feliz

donde los anzuelos de corazones

pesquen las sirenas 

con acordes de esperanza.


Un alma errante 

en mi primavera más larga

una esperanza en un manantial

donde se reflejan los pendientes

de tu cara.


Quisiera ser un arrullo de palomas

donde tu sed de amor me saciará

con los besos y los abrazos 

que te salgan de la rosa 

que llevas en tu corazón 

que se me perdió una mañana.


EL SOL

 




EL SOL


El sol se levanta poquito a poco

asoma su carita risueña

sus ojos de hilos de oro

para coser la mañana.


Se levanta cansado

de su lucha con la luna 

qué se marcha enamorada 

en su globo de nostalgia 

a otros lares.

donde le esperan vergeles

en la otra cara del mundo.


Los luceros tintinean su salida

que les permite descansar 

hasta 

que vuelve de nuevo 

la enigmática oscuridad 

poder vigilarla con sus ojos 

de diamantes que brillan 

como la mañana.


El mar lo espera sereno

para que pueda descansar 

sobre sus enigmáticas 

y azuladas aguas 

cuando haya alcanzado 

la mitad del cielo.


La vida de susurros 

de la noche 

da paso a la alegría 

de la mañana

donde los seres del día 

juegan a buscarse la vida 

en estaciones de nostalgia


LA INFELICIDAD

 




LA INFELICIDAD


La noche oscura 

de las soledades perdidas

entró por mi cornisa cuando la luna, 

como espejo de luceros

brillaba en el cielo.


Encendiendo la lámpara de mi felicidad,

pasajera, fugaz

como la gaviota cuando penetra en el mar 

buscando a su presa.


La felicidad abandonada 

en un mástil, con velas

de amargura 

se instaló en la vereda 

de mi vida

hace mucho, cuando el mar 

inició su retroceso.


Ese pesar nostálgico 

me lleva por territorios 

de relámpagos enfurecidos 

como en la creación

principio del caos del universo.


Esa vida ni tuya ni mía

mundana, plebeya, pecaminosa

configuran mi tristeza, 

mi alto grado de frustración 

como el poeta que no logra crear el poema.


Te di todo mi amor, mi grandeza 

mis sueños turcos, mi pereza

los lamentos de una fresa 

cuando llega la recolecta


Encontré una tierra mustia

donde los prados eran carreteras 

de grava, alquitrán negro

qué refleja mi dolor, mi tristeza.


Así deambulo con mi pesar

como el caballo 

con sus alforjas

abandonado a su suerte 

porque el duende de su amo 

quedó muerto en una vereda.


Ya no siente, ni sufre

espera que lo devore la tierra

y poder iniciar el ciclo 

del nuevo caos 

en que su mente, está inmersa.



POR TI

 





POR TI


Te desnudé tu cuerpo

una mañana;

te vestí de princesa

una corona de diamantes

sobre tu cabeza

un zarcillo de luna

colgué en tu  oreja.


Te conquisté el corazón

con escudos y espadas

usados en las cruzadas

del amor a cristo

aunque cristo, no estaba.


Te alquilé el alma

con una farola de la calle

alumbrando mi porvenir

mis anhelos, mis deseos

más mundanos,


banales…


Te mostré mis sentimientos

claros como el agua

resplandecientes 

como el sol en tus cabellos.


Deslumbrando tu despertar

con mi cuerpo, con tu aroma;

mi pecho ahuecado 

quiere salir

mostrarte que eres un rubí

piedra preciosa de mi lamento


Te di mi amor más sincero

el que resuena por las noches

en tu nido de amor, congelado

de recuerdos.


Que te envuelven

de miedos, que desaparecen

cuando me nombras en tu almohada;

dudas las necesarias para mantenerte

en vilo cuando la noche está calma.


Siento tu respiración

aunque no me hablas

mis dedos se aceleran

como las neuronas en mi cabeza

cuando te siento conmigo

aunque sea a la distancia.


DIFUSO


 


DIFUSO


Difuso como el viento

cariñoso como una caricia

adentrarme en ti mariposa

es una sensación que mi alma

necesita.


como las olas

la orilla, donde muere su viaje

por el mar de excelencias 

que deseo compartir contigo 

en este mundo mágico.


Me ahogo en tu lamento, no 

en tu soledad

en tus días sola

mientras el otro bebe el elixir

del mareo y del bamboleo.


Cómo olvidar con facilidad

tu rostro desvanecido 

en la oscuridad de este invierno

largo y frío. 

Ven a mí con ternura

con fragilidad sin desaliento.


Cuando las estrellas

alumbran mi casa;

vienes hacia mi, como luna

que se refleja en las montañas

de mi vida, aliento, susurros, risas…


El pecado penetró en mi vida

con su balada de maldad

bebedlo a grandes tragos

porque la vida se va 

fugazmente

como un suspiro latente

cuando estás en trance.


Difusa es tu vida y la mía

efímera cuan plumero al viento

no hagas de estas letras un lamento

vívelas como son, difusas

pero con aliento.



RESPUESTA AL AMOR

  



RESPUESTA AL AMOR


Me gusta escribirte poemas

porque tu alma acelero

y provoco en ti sentimientos

que me hielan el alma.


Me gustaría mirarte 

que me miraras

como mira un pequeñín 

a su madre.


Mi soledad huiría a otra parte

si estuvieras conmigo, queriéndome 

adorándome como los Reyes Magos

adoraron al niño, en su pesebre.


Quiero ver tus labios 

como una fresa

jugosa en mi boca


Mi corazón acorralado

cuando te busco y no te encuentro

solo silencios que me atragantan 

la garganta y ya no sé qué decir

me quedo mudo, sin aliento.


Cuando no estás tú, musa

ya no sé escribir, mis dedos

se agarrotan se enfrían 

no golpean las teclas 

con sentimiento.


Me abruma el miedo

de perderte y dejar 

de sentir esa inspiración

que me lleva por la senda del viento.


Ese viento que te convierte 

en amazona sin caballo

sin espuelas, ni valle

por el que galopar


Ese caracoleo por mi vientre

esa sensación turgente

ese malestar conmigo mismo

por no saber alimentar tu ego

lo suficiente.


Sé que el silencio 

lo da tu orgullo

cuando lees lo que escribo

yo soy la mente, tú la belleza

lo indescriptible, lo inenarrable

lo que nunca soy capaz de transcribir 

en mi libreto.


Eres mi motor, mi aliento

el aire que me sustenta

el corazón que me alimenta

el alma que me da cobijo.


Quisiera correr por railes de viento

tener una mecedora contigo dentro

un baño comunitario 

que expurgue mis lamentos.


Tener un río 

que me lleve a tu encuentro

bombeando el aire 

con nuestro amor

dirigirme hacia ti

por caminos de felicidad

aunque esté muriendo